El suministro de medicinas continúa registrando serias fallas, sobre todo en los medicamentos para pacientes con enfermedades crónicas. El presidente de la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven), Edgar Salas, señaló que los pacientes deben recorrer entre cinco y ocho establecimientos en busca de los medicamentos.
Estiman que las fallas se deben al lapso que se toman las droguerías para atender a las farmacias, cuya reposición de inventarios se realiza cada tres o cuatro días, cuando debería realizarse diariamente.
Asimismo, las investigaciones efectuadas por la federación arrojan que productos como antiespasmódicos, antihemorrágicos, broncodilatadores, hormonales e insulina, tienen serias fallas de abastecimiento.
Igualmente hay faltante en anticonvulsionantes, antidepresivos, para el control de Parkinson, Alzheimer y tiroides, no se consiguen y además, no tienen sustitutos en el mercado.
Salas explicó que estos productos en su mayoría se importan terminados, por lo que estiman que los retrasos en la nacionalización de estos productos puede ser la razón fundamental de las fallas en el mercado.
Sin embargo, Fefarven está verificando si en efecto los productos y materias primas se encuentran retenidos en los puertos. La Federación exhorta al Ejecutivo Nacional a tomar las medidas pertinentes para acortar los tiempos en la verificación de medicamentos en las aduanas.
Por otra parte, Salas manifestó que esta semana las fallas en general se redujeron 5%, por lo que las deficiencias en el abastecimiento de medicamentos se ubican en 20%.
Asegura que hay un repunte en el suministro de analgésicos, antipiréticos y antigripales en los puntos de ventas.
No obstante, desconocen el por qué de las deficiencias en el mercado, pues CADIVI aseguró que han liquidado las divisas solicitadas por el sector, al tiempo que los laboratorios han manifestaron que en efecto las han recibido.
Salas indicó que en la cadena de comercialización es difícil que se desvíe o se acapare el 20% de los productos.
Diario Economista24, Publicado Por Karolayn La Rosa
